LA CARA DEL DIABLO.
Una mezcla de colores, olores, magia y misterio. Cada año, la provincia de Jujuy, en el norte de Argentina, invoca a la Pachamama con sus Diablos en el "desentierro" del Carnaval para darle de comer y beber como un gesto de agradecimiento por las bendiciones recibidas durante el año.